Me duermo... recobro la conciencia en un sitio oscuro... o no veo nada... no es mí cuarto. en cuanto me doy cuanta de que estoy en una vivencia, noto un vértigo en mí pecho fortísimo es un remolino hacia mí interior por el que caigo, controlo el vértigo y lo dejo fluir manteniendo la conciencia... todo para, estoy en otro sitio... pero este ya si que es mí cuarto, y estoy en mí cuerpo físico.
• La sensación de vértigo es brutal, y definitivamente se siente como un remolino hacia el interior